lunes, 9 de febrero de 2009

BARRIOS POBRES, GENTE POBRE, UN PAÍS OLVIDADO DENTRO DE NUESTRA CIUDAD

Septiembre 14, 2008 by desdeabajo

Desde Abajo

Más de 11 millones de argentinos son pobres y 4,7 millones son indigentes. Los datos fueron anunciados por el INDEC. Los números que expresan la realidad social de los argentinos siguen siendo lapidarios: unos 2.524.000 hogares, o sea más de 11 millones de personas (47,8% de la población) son pobres, y 4,7 millones de ellos (20,5%) son indigentes. Es decir que hay 1.044.000 hogares que no cuentan con los ingresos suficientes para cubrir la canasta mínima de alimentos. El INDEC ubica por debajo de la línea de pobreza a quienes no cubren el costo de una Canasta Básica Total (CBT) -que incluye alimento, educación, vivienda, salud y servicios-. Y considera indigentes a aquellas personas cuyos ingresos son menores que los necesarios para alcanzar la Canasta Básica Alimentaria (CBA). Una familia tipo, compuesta por dos mayores y dos menores, de 5 y 8 años, necesitaba en febrero, según los componentes de la CBT, 718,46 pesos para no estar por debajo de la línea de la pobreza. El mismo grupo familiar tenía que tener ingresos de 328,07 pesos -valor de la CBA- para no caer en la indigencia. Los ajustes tarifarios en luz y gas para las empresas terminaron por trasladarse al precio que pagan los consumidores por los productos que elaboran. Las subas en los precios de la carne, pollo, pescado y cigarrillos, aparte de otros incrementos que se verifican por estos días, golpean directamente a los sectores de menores ingresos.

La región del Gran La Plata no escapa al flagelo de la desocupación y los bajos ingresos. La pobreza alcanza al 34,1% de la población, mientras que son indigentes el 14,3% de sus habitantes, según datos proporcionados por el INDEC. Según datos del INDEC, en el Gran La Plata, sobre una cantidad estimada de 712 mil habitantes, la Población Económicamente Activa (PEA) es de 345 mil personas, de las cuales 297 mil están plenamente ocupadas, 47 mil desocupadas, y 59 mil subocupadas.

Los barrios más castigados por esta situación son los del Sur, los del Suroeste y los del Este. Específicamente pasando las avenidas 72 y 31, como así también las avenidas 80, 90, 137, 143, 44 y 520, nos encontramos con barrios empobrecidos, con miles de casitas y casillas, calles de tierras, pibes en las calles, mucha droga y alcoholismo, desocupados sin esperanzas, violencia familiar, escuelitas con infraestructuras en pésimas condiciones, etc.

Los barrios que sufren notoria pobreza son:

Zona Sur: barrio Elizalde, barrio de Puente Fierro, Altos de san Lorenzo, Villa Lenci, paraje La Armonía, zona de Arana, zona de los barrios de la Cárcel de Mujeres, de la zona de 66 y 170 hasta la zona de Ruta 36 yendo a la localidad de Oliden y barrio Dardo Rocha.

Zona Suroeste: Gambier, San Carlos, El Retiro, El Centinela, zona de la Cárcel de Olmos, Barrio Santa Rosa, La Cumbre, Las Quintas, La Granja, barrio Malvinas, Romero, Abasto, Colonia Urquiza, Barrio Káiser, zona de El Peligro Chico y la zona de la Ruta 2 hasta el kilómetro 72 yendo para la localidad de El Pato.

Zona Este: Barrio Monasterio, Barrio Jardín, Villa Ponsatti, Villa Progreso, El Carmen, El Palihue hasta el paraje La Hermosura (Ruta 11 y calle 659), Villa Montoro, barrio Aeropuerto, barrio Frisón y 19 de Febrero, barrio el Tejado, la zona de 7 y 640 hasta Villa Garibaldi y Parque Sicardi, y por la calle 659 yendo a la Ruta Provincial 30 hasta la localidad sureña de Ignacio Correas (calles 31 y 710).

Zonas aledañas a los distritos de Berisso y Ensenada: El Dique, barrio Hipódromo, Villa Arguello, Villa Catella y Villa Rubencito.

Zona Norte: Gonnet, Tolosa, las zonas de Hernández, Villa Serrante, Gorina y las zonas aledañas al Tren hacia Capital Federal.

1 comentario:

Ana Maria dijo...

¡Saludos!
Gracias por prestar atención a mi aviso.
Por su importancia, este aviso está subvencionado para que llegue a la persona adecuada.
Soy Ana María, de Tarragona, almirante jubilada, en cuidados intensivos por enfermedad.
Por esta enfermedad y por lo que revelan mis exámenes médicos, mi supervivencia es limitada.
Al no tener familia, mi padre eclesiástico y guía espiritual me recomienda dar mi herencia para obtener el favor divino por las actividades en las que me he involucrado durante mi carrera.
Para ello, deseo colocar a mi bichón Mila, que ha sido la alegría de mi vida durante los últimos años, con una familia, y una suma de 317.000 euros que, además de proporcionar los cuidados necesarios a Mila, se utilizará para ayudar a los niños pobres y a las personas sin hogar.
Para ayudarme a cumplir esta misión, me gustaría pedir a quien esté interesado que se ponga en contacto conmigo por correo electrónico para mantener una conversación franca y honesta.
Muchas gracias.
anamariajulio38@gmail.com